Francia y los amantes del teatro celebran a partir de ayer los 400 años del nacimiento de Jean-Baptiste Poquelin, Molière, el dramaturgo más popular en lengua francesa.

Conocido por sus comedias, Molière creó personajes como el burgués hidalgo, el avaro o Tartufo, que ya son parte de la literatura mundial y de la sabiduría popular.

Poquelin fue bautizado el 15 de enero de 1622 (hubiera nacido uno o dos días antes) en París y murió, en esa misma ciudad que lo encumbró, el 17 de febrero de 1673.

La capital francesa será el principal escenario de los homenajes; aunque Versalles, donde triunfó en la corte del rey Luis XIV, también le rendirá honores.

Con el cuadricientenario han surgido voces en Francia que piden que Molière entre en el Panteón, donde yacen los restos de los grandes nacionales.

El Palacio del Elíseo descartó esta posibilidad, al recordar que todas las figuras entronizadas en el mausoleo parisino son “posteriores al Siglo de las Luces y la Revolución” de 1789.

Las celebraciones tendrán lugar en los sitios que impulsaron la carrera del director y autor, empezando por su “casa”, la Comedia Francesa, creada siete años después de su muerte.

Un busto fue inaugurado ayer en Pézenas. Y habrá exposiciones en torno al vestuario que utilizaba la compañía de Molière en la Ópera de París.

Te invitamos a ver nuestro contenido en redes de: