La cocina francesa se considera la primera entre las cocinas occidentales debido al interés francés en el arte gastronómico, pero también debido a la rica gama de alimentos que se encuentran en el país: mantequilla, queso, vinos.
Se cuida especialmente el cultivo de hortalizas y legumbres, se utilizan setas del bosque y miel.
Tienen una gran variedad de animales, practican la caza y en su amplia costa vemos peces de diversas especies.
La historia de la gastronomía francesa tiene un hecho importante que marca su relevancia: la llegada de Catalina de Medici, casada con Enrique II. Ella trajo grandes noticias con sus chefs italianos y la forma en que las mujeres nuevamente participaron en los banquetes, refinaron los platos y el servicio.
Francia tiene dos instituciones que reflejan la importancia que concede a los ingredientes:
a) la guía Michelin, que otorga estrellas de calidad
b) la Denominación de Origen por la que se establecen rigurosos criterios de calidad y producción de los vinos regionales franceses y otros productos.
En Francia, la cocina regional es de vital importancia:
Norte: París, Ile de France, Champagne, Flandes y Picardía
Noroeste: Bretaña, Normandía, Orleans y Anjou.
Noreste: Alsacia, Lorena y Franco Condado.
Centro: Borgoña, Lyon, Auvernia, Saboya y Dauphiné.
Sureste: Provenza y Languedoc.
Suroeste y Sur: Gascuña, Burdeos, Perigod y Charentes.
París es conocida como la ciudad de la buena comida. Predomina la cocina de mercado ya que en sus campos se produce una gran cantidad de verduras frescas: alcachofas, berenjenas y hortalizas pequeñas llamadas “primeurs”.
En los mercados de París hay una gran variedad de quesos, pero es el queso Brie el que se prefiere. Es un queso cremoso y tiene una corteza blanca que lo protege.
Este queso se puede llamar Brie siempre que se prepare con leche de Brie, lo que le da su fragancia característica.
Hoy en día, París es considerada la capital de los restaurantes de Francia: desde restaurantes de lujo con 1 a 3 estrellas Michelin, hasta bistrós más baratos e informales.
Algunos platos clásicos de esta ciudad son:
Al noroeste de París se encuentra Champagne, donde se produce el vino espumoso más famoso del mundo: un vino que se fermenta dos veces y se almacena durante mucho tiempo en bodegas profundas. La cocina es sencilla, sustancial. Requiere un gran consumo de animales de caza y porcinos.
En Flandes y Picardía, vemos productos del mar y del río: las ostras y los mejillones son muy populares, acompañados de patatas, las verduras más populares.
Son famosas las galletas llamadas sables, hechas con masa de mantequilla rica en azúcar.
La gastronomía mexicana tiene sus orígenes en la época prehispánica. En este momento, se crearon una serie de platos a base de tres ingredientes principales: trigo, frijoles y chile. Estos se complementaron con hierbas, carnes de pequeños animales, chocolate, aves y pescados, entre otros.
¿Por qué es tan importante la cocina francesa en el mundo?
La cocina francesa es reconocida mundialmente gracias a sus platos de alta calidad, exquisitos y altamente refinados, su gastronomía gozando incluso del reconocimiento otorgado por la UNESCO en 2010 como “Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad”.
¿Qué influencia tiene la cocina francesa? Tradicionalmente, cada región tiene su propia cocina: … La cocina del norte se caracteriza por las influencias belgas y se sirve con patatas, cerdo, frijoles y cerveza; La cocina oriental, caracterizada por influencias alemanas, se sirve con tocino, salchichas, cerveza y chucrut.
¿Cuál es la importancia de la cocina francesa a nivel mundial?
La cocina francesa es la más influyente del mundo. Por sus técnicas ancestrales y su reconocimiento en lo que respecta a la creación de la brigada gastronómica. … Por ejemplo, para preparar fácilmente salsas, mermeladas o chocolate fundido, se utiliza la técnica Baño María, más conocida como Baño María.
¿Cuál es la base de la cocina francesa?
Marie-Antoine Carême, durante los siglos XVII y XVIII, colocó los pilares de las preparaciones básicas de cocina, que se entregaban en Francia como salsas madre: española, bechamel, tomate y velouté.
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